martes, 22 de enero de 2008

Sombras de Guerra



Hace un par de meses (el 20 de noviembre, sin ir más lejos) salió a la venta el videojuego Sombras de guerra, que ya estaba causando polémica aun antes de estar en el mercado. Este juego de estrategia en tiempo real, producido y desarrollado por la empresa malagueña Legend Studios, ofrece la posibilidad de recrear la Guerra Civil Española a lo largo de 25 misiones, y como era de esperar se puede controlar tanto al bando republicano como al nacional (además de otras tres facciones implicadas en esta guerra: rusos, alemanes e italianos).

A mi vecino le regalaron este juego para los reyes, pero todavía no lo he visto en acción. Técnicamente no me gusta mucho, por lo poco que he visto. Para empezar no me cuadra la estética adoptada. Se mezclan imágenes históricas de archivo con el diseño de personajes que parecen salidos del cómic americano o del manga, no hay más que ver a la guerrillera explosiva del bando republicano que aparece en los trailers o en el concepto artístico. Todo ello me induce a pensar que la profundización psicológica dentro del conflicto será más bien baja. Por las capturas de pantalla se puede apreciar que los gráficos no son nada del otro mundo, y por eso mismo me resulta extraño que el juego pida unos requisitos mínimos bastante altos para funcionar bien.



Resulta delicado abordar un tema tan espinoso como este mediante un videojuego, porque se corre el riesgo de trivializar un capítulo muy oscuro de nuestra historia reciente, cuando además parece que aún quedan algunas heridas sin cicatrizar. La proximidad espacial y temporal es algo decisivo a la hora de determinar qué puede hacer daño a la conciencia social y qué no. Cuando hace unos años FX Interactive desarrolló IMPERIVM II La conquista de Hispania, podíamos controlar ejércitos de íberos y de romanos que luchaban por el control de la península ibérica. Sin embargo, hace muchos siglos de aquellos acontecimientos, nos parece un recuerdo lejano, poco más que una imagen dentro de un libro de historia.

Este caso es bien distinto, ya que estamos hablando de un trozo de historia literalmente vivo. Meses antes de que se publique un juego, ya hay múltiples anuncios y comentarios en todo tipo webs especializadas. Buscando algo más de información sobre el mismo, fui a parar a un foro de la extrema derecha. Los que allí comentaban, bajo los apodos de generales franquistas, exclamaban con alegría la posibilidad de revivir la victoria del bando nacional. De la misma forma, podías llegar, con simplemente escribir el nombre del juego en Google, hasta otra página de la extrema izquierda donde los foreros comentan gustosos la posibilidad de jugar con el bando republicano y cambiar el rumbo de la historia(el juego también ofrece este final alternativo para la guerra).

Pero tampoco podemos ser hipócritas. Hay videojuegos a patadas sobre la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de ellos shooters. Yo he jugado a Wolfenstein, Medal of Honor y Call of Duty. Pero claro, ni te planteas a qué estás disparando porque en primer lugar es mentira, y en segundo lugar, luchas contra nazis. Ahora, esto me hace preguntarme: ¿cómo verán en Alemania estos juegos? Sin duda, pueden remover un amargo recuerdo en más de uno. El peligro de frivolizar la guerra está ahí, con títulos cada vez más cercanos en el tiempo, como Conflict: Desert Storm I y II, que se corresponden con la Guerra del Golfo y la reciente guerra de Iraq, respectivamente. Visto así, el colmo ya ha llegado. No es recrear batallas pasadas o de un futuro inventado, sino presentes y futuribles. Todo ello hace que llegue a pensar si en el juego estamos manejando un conjunto de píxeles o algo más.

Aquí dejo el trailer y la página web oficial: http://www.sombrasdeguerra.com , que está muy completa. Dentro de esta página me llamó especialmente la atención el proyecto "Galería MMS", donde cualquier persona puede enviar desde su teléfono móvil fotos de cualquier cosa que le recuerde a la Guerra Civil (estatuas, plazas, calles, documentos...). Como el tema me parece bastante interesante, espero los comentarios de mis fieles parroquianos habituales y de todo aquel que quiera opinar al respecto.

jueves, 10 de enero de 2008

Devil May Cry anime - una de cal...



Flaco, flaquísimo favor el que este anime hace a la franquicia de Devil May Cry. Se trata de una serie de tan sólo 12 capítulos, pero parece mucho más larga por lo tedioso que se hace ver cada uno de ellos. El universo de Devil May Cry tienen como protagonista a Dante, un cazador de demonios hijo de una humana y de un poderoso diablo. Sus juegos se caracterizan por tener una acción frenética: un beat´em up de los que hacen sudar, con hordas de enemigos y jefes finales durísimos. Un machacabotones con estilo y de la vieja escuela, se podría decir. Balazos, mandobles, muchos demonios y litros de hemoglobina. ¿Acaso era tan difícil? Con esos ingredientes, se podría haber hecho una buena serie, sin pretensiones filosóficas ni con una trama argumental compleja, pero por lo menos fiel a la acción y al ritmo del juego original.

Sin embargo, la serie dista mucho de todo esto. Hay demonios, sí, pero son demasiado escasos. Los combates, salvo contadas excepciones, son de lo más deslucido que pueda verse. En la mayoría de las ocasiones los monstruos no aparecen hasta el final, y el 90% del capítulo se desarrolla de forma lenta y aburrida, con una historia insulsa e infantil que le quita todo el encanto a la caza del demonio. Dante le sigue la pista y justo al final del capítulo se lo carga (generalmente de un solo golpe)… ¡pero si ni al final de la serie hay rivales dignos, hombre ya!

La trama gira en torno a un señor de los demonios, Abigaël, que va a ser resucitado después de no sé cuántos años atrapado en otra dimensión. Pero en realidad no se comprende casi nada de esto hasta que no llegan los últimos capítulos, puesto que todas las misiones anteriores son, sobre todo, inconexas. Se trata de una serie completamente prescindible, al margen de la historia bien trabada que ofrecen los videojuegos. No se habla en ningún momento de Mundus, el rey de los demonios, ni del caballero Sparda ni de Vergil -padre y hermano de Dante, respectivamente.


Aunque la estética de la serie me parece adecuada, sobre todo en el diseño de Dante y de otros personajes principales, la animación es generalmente pésima. Predominan las imágenes estáticas y los cuerpos de casi todos los personajes secundarios parecen hechos a molde (hay un modelo de figura masculina, y uno o dos modelos femeninos, con tetas L y XL). Sólo en algunos momentos puntuales, como cuando Dante desenfunda las pistolas o blande la espada, se aprecia un nivel de animación digno que tendría que mantener la serie más a menudo.

Por otro lado están las chicas que también cazan demonios. Está la rubia potente con pantalones de cuero ajustados, y la que va de colegiala mala potente ¿he recalcado lo de que están potentes? Dante está en medio de las dos, una fue su pareja y la otra intenta flirtear con él. Es la situación perfecta para propiciar momentos erótico-festivos. Pues ni eso se han olido los guionistas. La mayoría de sus conversaciones se resuelven de esta forma: “Oh, Dante, qué vago eres” le dicen ellas cuando se pasan por su agencia. Él suele responder “Tengo muchas deudas” o “Qué difíciles y cuánto gastan las mujeres”. Estos clichés no estarían mal si se intercalaran entre diálogos con más “chicha”.

La cosa empieza a oler raro desde el primer capítulo. A ver, Dante, te encargan que vigiles a una niña a la que persiguen unos malosos. Aceptas el trato a regañadientes, no es tu estilo, lo comprendo. Bien, la proteges de dos o tres demonios, te los cargas a balazos casi sin pestañear. La niña, a pesar de parecer una malcriada, tiene agallas, pues ni se inmuta y sigue dándote la lata con su cantinela. Pero de camino a no sé qué sitio, tenéis que parar en una pensión. ¿Te duermes y la dejas sin vigilancia? La niña se va alegremente a buscar a su madre, y luego la salvas de otra panda de demonios, a balazos otra vez, un segundo antes de que se la coman. Pero bueno, el balance del primer capítulo, con todas sus incongruencias, no está tan mal, porque dices: bien, ha habido demonios, tiros y sangre, esto es lo que esperabas ¿no? Y en el próximo habrá más de esta acción desenfrenada y sin sentido… Pues poco más te vas a llevar.

En resumen, un despropósito a todos los niveles. Sólo un fan recalcitrante podría encontrarle algún encanto. Yo estuve a punto de flagelarme después de ver el último capítulo.